Una playa casi virgen
La playa de Camposoto nace junto a la desembocadura del río Arillo, cerca
de la ciudad, y la Playa del Castillo es su continuación natural. Pero son
diferentes playas porque la una es la clásica playa arenosa, semiurbana, y la
otra es una playa con una riqueza natural que la hace una verdadera joya.
En la parte más próxima al océano de la desembocadura del río se han
formado diversos sistemas dunares, conformando un rincón de gran belleza y con
un ecosistema propio, más cercano al atlántico que al estero que predomina en
la vecina playa de Camposoto.
Ésta del Castillo por ser la más cercana al islote de Sancti
Petri, cuyo castillo militar es bien visible desde la playa.
A efectos prácticos la Playa del Castillo es de las que siempre tiene
bandera azul. Es una playa con amplio aparcamiento y todo tipo de servicios con
una gran riqueza en vegetación.
Cuando la marea baja el islote de Sancti Petri parece hacerse más
accesible. Es un momento ideal para pasear, porque la zona dunar parece crecer.
Tiene una longitud de 2.200 metros con una anchura media de 40 metros,
aunque cuando baja la marea alcanza fácilmente los cien metros de anchura. Por
hallarse más allá de la Playa de Camposoto, una de las más grandes de España,
su nivel de ocupación es relativamente bajo, pudiéndose definirse como una
playa tranquila.
Dispone de aseos en bungalows de madera, de servicios de salvamento, de
duchas y de todo tipo de equipamientos. Recordad que tiene bandera azul, lo que
garantiza buenos servicios y una playa de calidad.
Para mí es una
de las mejores playas del litoral gaditano. Por sí misma, por su sistema dunar
y por el paisaje que conforman el castillo de Sancti Petri y la Punta del
Boquerón.
Estas fotos la tomé
la mañana del 7 de septiembre del 2015. © Julio j Cordero Muñoz
No hay comentarios:
Publicar un comentario